enero 29, 2017

Skaters en Barcelona


Estaba en pleno verano 2016. Tenía muchas ganas de ir a camina y quería ver gente, así que agarré mi bici y me fui a la playa.
Me queda cerca la primera playa, a unos 10 minutos en "bajada". Pero quería ver MUCHA gente así que seguí eternamente y llegué hasta el famoso Hotel Wella. 
este chico estaba totalmente dedicado a hacer piruetas, no hacía más nada y no hablaba con nadie. Esta ahí solamente él, no había turistas y no había más gente alrededor; solamente su patineta. Y yo, queda claro. 

La idea de salir ese día con mi cámara, era hacerme amiga del objetivo Minolta que acababa de descubrir. Es un objetivo manual, con anillo de apertura (hermoso, ¿verdad?). Tenía que conocerlo y ver qué tal me sentía con él. Me encanta. 
Sobre la experiencia con ese nuevo objetivo, puedo contarles que es para los días en que esté sola y quiera meterme mucho en la actividad, la cantidad de tiempo dedicado a cada foto, se duplica o triplica. Maravilloso también. 


Después de ir a la playa, tenía que volver a la primera playa a la que fui, porque es la que queda en la vía hacia mi casa. Marbella, se llama.

Ahí me senté un rato, esperando que alguien me inspirara un poco y porque ya venía emocionada. Ahora quería complicar la historia con una foto más rápida. Acción. Y fue cuando este chico de abajo, salió.
No tengo conocimientos del mundo del skate, bicis o afines, nunca he visto competencias ni sé qué se busca en momentos así, pero ahí estaba esperando encontrarme con algo que traer a casa.
Así que emocionada y muy satistecha, aquí las tengo. Son el resultado de trabajo y concentración de ese primer día, trabajando lentísimo y sin enfoque automático posible.