mayo 22, 2009

Limites necesarios

Gigante o pequeña, en un tarro de cristal, se acurruca una niña con ganas de llorar,
Siempre dice estar sola y extraña en un lugar, donde todos se rien sin mirar hacia atras.
Cada dia esta niÑa, que no para de llorar,
sola, escribe en las paredes que parecen no guardar ni una sola palabra,
en sus muros de cristal.
Pero sueña algun dia en poder encontrar, quien con ella se quede a mirarla respirar.
Con sus dedos bien largos acaricia el cristal, que la tiene tan presa y la deja observar, como pasa la vida sin poder escapar.
...Y Vestida de blanco no para de llorar, su ropita tan corta ya no la veran mas,
a otro patio esa niña se pudiese escapar y romper ese tarro para otro agarrar.
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